Antes de la aplicación del método científico y del advenimiento de la medicina moderna la mayoría de tratamientos "tradicionales" no tenían una relación directa con la enfermedad. El paciente y el sanador atribuían mejorías a una relación causa-efecto ente el tratamiento y la curación, y explicaban esta relación mediante razonamientos no contrastados basados en creencias sin fundamento científico... purgar es curar.
- Terapias de Sangria. Surgen a partir de la idea de que la sangre es portadora de vida y de que la enfermedad surge a partir su corrupción. Existen referencias en el Ayur Veda indio (2000 a 1000 a.C) en la china del siglo III a.C y en Japón a partir del siglo VII apoyado en la filosofía del Ying Yang Taoista con el fin de recuperar el equilibrio. También hay menciones de sangrías en el Talmud hebraico, y en culturas precolombinas de Suramérica. A partir de Hipócrates (460-377 a.C) en el mundo griego se extiende la teoría de los humores: sangre, bilis amarilla, bilis negra y flegma originadas en el corazón, hígado, cerebro y bazo y cuyas alteraciones resultaban en enfermedades. A partir de aquí la flebotomia se convierte en un acto terapéutico racional que busca extraer la flema pútrida para recuperar el equilibrio perdido. La flebotomía se afianza en el imperio romano con Aurelio Cornelio Celso y después con Claudio Galeno (131-205 d.C) y se establece el concepto de sangría revulsiva (en el lado opuesto a la dolencia). La Edad Media basa su medicina en el saber galénico y la sangría es adoptada incluso por el clero hasta que a partir del siglo XII la iglesia prohíbe su uso (ecclesiae aborrexit sanguinis). A partir de aquí las sangrías quedan en manos de minutori, curanderos itinerantes que debían asumir el pago de multas en caso de daños. En el siglo XVIII la sangría vuelve a ser de uso frecuente y en las colonias españolas estaba reglamentado la obtención del título de Maestro en Flebotomía. En 1799 el propio George Washington muere de una laringotraqueitis aguda tras 4 sangrías en 12 horas en las que se le extraen 2,3 litros de sangre.
Ya en el siglo XX la sangría se fue abandonando y ha quedado limitada casi exclusivamente al tratamiento por efecto depletivo en edema agudo de pulmón y tratamientos de hemocromatosis hereditaria (incidencia 5 por 1.000). A lo largo de la historia la sangría sin duda ha provocado o acelerado la muerte de muchísimos pacientes. Un ejemplo de la conjunción de un entendimiento erróneo de la salud y la enfermedad, la necesaria terapia (extraer lo corrupto) e incorrecta interpretación de los efectos obtenidos.
- Cupping o Hijama: Una variante de la sangría de origen oriental que todavía perdura y con cierta popularidad en el ámbito de “medicinas alternativas” es la técnica del “cupping” también conocido como as Al-Hajama (Hijama) o Ventosaterapia. Como la sangría y sus variantes, el Hijama se fundamenta en el principio de purga y eliminación de componentes tóxicos de la sangre para la sanación de prácticamente cualquier tipo de dolencia. El “cupping” consiste en la aplicación a la piel de recipientes a los que se aplica un vacío por succión directa o calor previo y enfriamiento. El vacío resultante tiene como consecuencia directa la extravasación de la sangre de los capilares más superficiales y en su versión más ligera la generación de un leve moratón. En sus versiones más drásticas se producen moratones de larga duración o se practican incisiones para el drenaje de la sangre (ver video).
Bibliografia
La sangria: del mito al logos y del rito a la tecnica, Jorge Manrique
Medicos y Medicinas en la Historia 2002 Vol. I No.3
http://www.bestcuppingtreatment.com
http://bekamsingapura.com
http://www.cuppingtherapy.co.uk
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